jueves, 18 de agosto de 2011

¿Quién es Julieta?



Los cabellos largos y canosos le escurren por el rostro dormido, algo le inquieta, abre los ojos y ve el cielo, negro, lleno de estrellas, eso lo tranquiliza. Después escucha una voz, que viene, vuelve, no deja de venir, voltea: una pequeña dice, repite, angustiosamente, su nombre, parece callarlo y lo grita: Fernando, Fernando, Fernando…. La ve a los ojos, un momento, ella lo mira fijamente, despierta. Llora disimulada y amargamente. La gustaba Julieta, a Delgadillo le gustaba Julieta. Y a mí también.

La primera vez que escuche esta canción una tristeza extraña me vino encima, al punto de derramar algunas lágrimas, sin conocer siquiera a alguna Julieta, sin tener una trágica historia de amor en los primeros años –lo más cercano a eso habría sido aquel noviazgo que un día comenzó con el recreo y que para el segundo toque ya había terminado-, sin un roce cercano con la muerte o la tragedia, sin una vaga idea de quien era Julieta…

Hace ya algunos añitos de eso, y hoy parece que entiendo por qué me conmovió hasta las lágrimas el recuerdo cantado de un cuarentón que perdió a su primera novia hace treinta y tantos años por azares del destino: precisamente son esos azares del destino los que duelen.

Eso y la incertidumbre que conllevan: Delgadillo sufre todavía por Julieta, sueña con ella, en esas noches en las que uno no tiene nada que hacer recuerda sus cabellos largos, el muro de su casa y su cuaderno. Y Julieta, al recordar cunado tenía diez años lo único que piensa es en la muerte de sus padres y la mudanza a la casa de los abuelos, muy probablemente ni siquiera recuerde que el nombre de aquel niño que decía quererla era Fernando.

Muy probablemente, de no haberse ido, Julieta y Fernando se habrían quedado juntos. Muy probablemente habrían tenido alguna discusión trivial y habrían terminado. Pero Delgadillo nunca lo sabrá y Julieta será siempre, para él, la niña que amo y perdió.

Ella es Julieta. No es la perdida, sino la duda.

¿Quién es Julieta? Julieta es Janet, mi compañera de banca en la clase de química, una rubia naturalmente ingenua, por no decir tonta, simpática y buenísima, a la que todos le veían las piernas en la secundaria, nunca le hable, y tres años después me entere que estaba enamorada de mí. Julieta es también Boris, un desgraciado, huraño y feo gato que mi hermana adopto a los ocho años, se fue un día –presumiblemente en busca de una cajetilla de cigarros- y no regreso, nunca supimos que le paso, mi hermana lloraba, no porque no estaba, sino por no saber en dónde sí; Julieta fue también la revolución, ese poster del Che Guevara que todos tuvimos un día en la pared de nuestra habitación, cuando entendíamos poco del mundo pero ya estábamos bastante enojados con él. Julieta es Sofía, la profesora de periodismo más cachonda que la universidad tiene, y la insegura probabilidad de llevársela a la cama.

Julieta es el que vas a hacer cuando seas grande, el faje con una rubia en la secundaria, un gato feo y perdido en las calles de Berlín, el socialismo y la revolución, el revolcón con una profesora, el sueño, la oportunidad perdida.

Por eso llore con ella, llore con Julieta, por eso todos lloramos: porque todos hemos perdido algo.

2 comentarios:

el Patch dijo...

Sofía no está tan buena -_-

Solero dijo...

Sinceramente nunca me ha gustado esa canción, sé que a muchos les encanta y esta en su top five de canciones, pero no sé, a mi no me ha llegado, incluso una chava me llego a decir que no tenia gusto musical cuando le dije que no me gustaba, porque ella si era/es bien fan del Sr. Fernando Delgadillo. Aunque esa canción no me gusta tiene otras que si. Mis respetos a este Señor que se ha mantenido a flote tanto años . :D