Nueve de nostalgia y llanto presenta: Fiestas de Diciémbre

Un saludo nostálgico a todos los que gozan de perder su tiempo en este su espacio proveedor de ocio.

Esta es la segunda entrega de nueve de nostalgia y la dedicaremos a recordar como eran las fiestas decembrinas en aquella época añeja que recordamos con enorme envidia y placer.

No variemos la zona urbana donde se emite esta retrospectiva y enfoquémonos un poco en los ambientes de esta mancha urbana donde lo ultimo que muere es la esperanza… de hecho es lo único que sigue vivo.

Aquí las celebraciones comienzan con un día dedicado a una figura religiosa llamada “la virgen de Guadalupe” a quien ANTES se le dedicaba una ceremonia de carácter religioso con un respeto enorme, donde la gente se congregaba alrededor de improvisados altares en plena vía publica, los caballeros se quitaban el sombrero y las señoritas asistían con velos. Todos con una enorme atención al representante religioso en turno y teniendo en mente nada mas que fe y agradecimiento a esta milagrosa figura comodín de milagros y proveedora de esperanza.

AHORA: el altar improvisado se mantiene, pero los supuestos caballeros que se encuentran en la periferia solo se congregan para observar a las muchachas que asisten vestidas con diminutas faldas o blusas escotadas, que a su vez lanzan descaradas miradas a estos, la señora gorda se quita la pijama habitual y asiste con su bata de noche de lujo, solo para hacer mención póstuma a la ceremonia del mal gusto que tienen las hijas de su vecino para portar diminutas faldas. Además después de la ceremonia no existe un mejor pretexto para acompañar a la noche con un estruendoso sonido de música de la peor clase (Regueton) y todo esto acompañado de la bebida etílica de la preferencia popular o para la que alcance el capital destinado a esta noche. Por cierto, nadie atendió la ceremonia.

Después se acostumbra una serie de representación del peregrinaje de ciertos personajes bíblicos, así es, estoy hablando de las posadas.

ANTES estas eran la mejor manera de demostrar la solidaridad de los vecinos con uno mismo, y al mismo tiempo para pasar un rato agradable, por supuesto, con un extremo respeto a las figuras que ruedan de residencia en residencia llenando de honor a la morada.

AHORA los pequeños tienen que aguantar el rosario para hacerse acreedores de un aguinaldo que consta de un poco de colación, cacahuates y por supuesto una taza de ponche de frutas.

ANTES caminaban buscando la posada sosteniendo lucecitas de bengala para mostrar la importancia del acto, cantando una estricta letanía y sosteniendo la velita para no quemar a la persona que camina de frente.

AHORA sostienes la luz de bengala para quemar al de enfrente, te haces el gracioso cambiando la letra de la letanía y cubres tu velita para que el abusivo de enfrente no te la apague.

Después viene el día esperado por todos los niños y niñas de cierta época ya pasada. Navidad; definido según la deidad favorita de quien proporcione el concepto.

ANTES cenabas un rico banquete hecho en casa; ya fuera Pavo, pierna o romeritos, organizaban intercambios de regalos en familias que constaban de mas de cinco hermanos, donde sacabas un papelito con el nombre de la persona a quien regalarías además a las doce todos se ponían de pie para escuchar el brindis del rey de la casa.

AHORA cenas algo prefabricado porque ya no hay quien cocine, sacas un papelito con el nombre de tu papa o tu mama para ver con quien la pasaras, porque desde el divorcio todo es un lio. Además a las doce en punto todos se paran alrededor del tío borrachín que ya esta haciendo desfiguros.

Después el año llega a su fin, se acaba un ciclo y comienza otro.

ANTES hacías una lista de propósitos que por lo menos durante enero tratabas de cumplir, te comías doce uvas al sonar de las campanas y pedias un deseo por cada uva.

AHORA haces una lista de gente con quien quieres ligar, te propones salir con doce personas por quien cada una de ellas sientes un deseo pecaminoso.

Y finalmente el día seis llegan los reyes magos en su caballo, camello y elefante, pasan a todos los hogares y dejan lindos regalos que habías pedido en una cartita que dejabas en tu zapato o que habías enviado en un globo… bueno, eso era ANTES.

AHORA crees que las monarquías son gobiernos totalitarios que deben de caer en nombre del “mundo libre” (porque ya eres Xenofóbico) crees que hacer viajar a un elefante, un caballo y un camello toda la noche es un crimen y Greenpeace debe intervenir. Además eso de la carta es poco fiable, tú no corriste riesgos y mandaste tu pedido por e-mail o por fax.

Por eso y mil razones más la época de nuestros ancestros era más placentera.

Antes de despedirme, aun cuando no tiene nada que ver les dejo otro par de videos ANTES/DESPUES para volverlo sello de esta sección

ANTES:



AHORA:





Yo me despido recordándoles que el tiempo que gastaron aquí lo pudieron emplear en algo de provecho… o hacienda finanzas porque la cuesta de enero esta difícil

¡!CAMBIO Y FUERA¡!